La nueva masacre sionista tiene lugar bajo el auspicio de EE.UU. y del criminal de guerra Joe Biden, denunció el FPLP.
Frente Popular de Palestina condena feroz agresión israelí a Rafah
El Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) condenó la atroz masacre del enemigo sionista a la ciudad de Rafah donde murieron decenas de mártires y otro centenar resultó herido.
La brutal incursión no tuvo en cuenta los miles de civiles desplazados desde otros puntos de Gaza y apuntó a sus tiendas de campaña, infraestructuras, mezquitas o casas de seguridad, afirmó el FPLP.
En ese sentido, acusó a Estados Unidos y a la administración de Joe Biden por dar luz verde y su pleno auspicio a tan horrendo crimen.
El Frente subrayó que este nuevo hecho y el continuo genocidio contra el pueblo en toda la Franja de Gaza tienen lugar de manera incontrolable y a la vista de todo el mundo, bajo la sombra del silencio y la complicidad internacional y árabe.
La masacre de Rafah confirmó la caída moral y rotunda de la comunidad internacional, y expuso la falsedad de los valores del mundo libre, instituciones internacionales y los países occidentales.
Asimismo, expuso las posiciones cómplices e inactivas del régimen oficial árabe.
El FPLP llamó a las masas árabes y a los pueblos libres del mundo a salir inmediatamente a las calles y al campo de batalla para presionar por el fin de la guerra de genocidio sionista contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza, y para condenar la asociación entre Estados Unidos y Occidente en estas masacres.
El pueblo palestino, a pesar de la guerra de exterminio y la traición, resistirá y enfrentará la agresión con su sangre y los restos de sus hijos y no levantará la bandera blanca. Triunfará y derrocará inevitablemente la agresión con la fuerza y la solidez de su valiente resistencia y la firmeza del pueblo digno de Palestina, concluyó el Frente en su declaración.
Los ataques a esa ciudad al sur de Gaza comenzaron durante las primeras horas de la madrugada del lunes con varios tipos de helicópteros y drones.
El ocupante allanó la entrada al barrio de Siamat, desató cinturones de fuego y destruyó completamente casas civiles y mezquitas en la zona.
Las intensas incursiones dejaron más de 220 civiles asesinados y decenas de heridos, la mayoría de ellos mujeres y niños.
Fuente: Almayadeen